Cap.2 Nuevo amanecer

las 11:30 de la noche. el dolor punzante aun no se iba.
las lagrimas se habian detenido, pero no por eso junto con ellas la tristeza, algo de mi se estaba muriendo, poco a poco, me hacia a la idea del gran final... de una historia, de una vida, una ilusion, UN AMOR...el primer amor...el amor.
ya no recordaba a que hora era que yo habia llegado aqui -me hubiera gustado no recordar lo que paso cuando llegue- pero algo me decia, que ya habia tardado mucho, y que debia regresar a casa... recorde que llebaba conmigo un celular, lo saque del bolsillo, lo abri y note que tenia seis llamadas perdidas, eran de mamá, no las respondi, era tarde y yo ya iba de regreso a casa...
maneje con cuidado el beattle que me habian regalado todos mis primos -que eran como mis hermanos- el dia de mi cumpleaños, no queria tener un accidente, por lo menos, no por hoy.
llegue a mi casa, todo estaba apagado, excepto, la luz de la gran sala de estar y el porche.
aparque el carro en el garage y entre en la casa. si era papá el que esperaba, me daria un santo sermon, pero si era mamá, solo me pediria explicaciones.
estaba sentada sobre el sofa, con sus lentes puestos y leyendo un libro, se notaba tensa y preocupada...por mi.
abrio los ojos como platos en cuanto me vio, seguro era que mi cara estaba hinchada de llorar, sentia el arena incluso, hasta en mi garganta, lo cual era imposible, pero no tenia fuerzas ni para hablar. la abrace como jamas en la vida habia abrazado a nadie, y me deshice en sus brazos a punto de caerme, me detuvo con su abrazo mientras yo sollozaba mi pérdida.
-¿que paso?- pregunto mientras separaba mi abrazo de su cuerpo
no dije nada, me deshice de sus manos, tape mi rostro con mis dos manos y me fui corriendo a las escaleras, entre a mi cuarto, azote la puerta y me cai de rodillas al suelo, aun con las manos en mi rostro, no dije ni hice nada, sentia mi cuerpo demasiado pesado como para moverlo un poco mas, espere a que pasara el tiempo, sin decir nada.

el dia tenia cierto tinte de tristeza, o tal vez solo era yo, pero de cualquier manera, no era un buen dia, estaba nublado, odiaba estos dias, pero esta vez me dio igual el maldito clima, de cualquier manera, este no cambiaria mi estado de animo. nada podria hacerlo.
hoy comenzaba algo nuevo, algo que ya no recordaba, algo que me dolia, que palpitaba dentro de mis venas, lastimandome, y tenia miedo... miedo a lo desconocido.
no recordaba como era que esa manta habia llegado a colocarse sobre mi cuerpo, yacia tumbada en el suelo titiritando de frio y solamente podia escuchar el maldito zumbido del despertador.
como pude, me arrastre -literalmente- hacia la mesita de noche para apagar el despertador, no tenia puesta la pijama, sino la ropa del dia anterior y hacia frio.
me recargue sobre la pared, aun sin levantarme, ya no estaba llorando, no sollozaba ni habia rastro de tristeza, excepto mi corazon roto y mi cara hinchada, todo estaba normal...
se abrio la puerta de mi habitacion lentamente, una mujer de rizos castaños hermosa hasta lo increible entro y me dijo:
-¿como estas cariño? ¿quieres hablar?- pregunto mamá.
menee la cabeza de un lado a otro negando tal posibilidad, caminó hasta donde yo estaba, se sento a mi lado, paso su brazo por mis hombros y acurruco mi cabeza en su pecho como cuando yo era niña. ya no tenia ganas de llorar y no lo hice, pero tampoco me deshice de su abrazo. permanecimos asi durante mucho tiempo, pero recorde que yo tenia que ir a la escuela, y que, por mucho que yo no pudiera concebir esa idea, aqui no se terminaba el mundo, al menos no para los demas.
no importa en cuantos pedazos tu corazon se partió, el mundo no se detiene para que lo arregles... recorde la frase de william shakespeare.
me deshice de su abrazo y susurre:
-¿puedes dejarme sola? me voy a dar un buen baño, supongo que me hace falta.
se levanto y salio cerrando la puerta de mi habitacion sin decir nada, a ella le dolia muchisimo verme asi, lo sabia, desde el momento en que me miro ayer cuando entre por el umbral de la puerta.
entre en la ducha, no tarde mucho ya que faltaba poco para salir de casa e ir a la preparatoria. escogi prendas adecuadas para una mañana un poco nublada, lo cual era muy raro aqui.
una blusa blanca de algodon, una cazadora color cafe, unos jeans entubados y unas botas con tacon bajo tambien color cafe. deje mi cabello ondulado esparcido sobre mi espalda.
tome mis libros sobre mi brazo y sali por la puerta de mi habitacion...