Cap. 3 Corazón Roto...

Sentia todos y cada uno de mis musculo entumecidos, aun manejando hacia la escuela no podia tranquilizarme, no del todo, estaba tensa, tenia frio y senti mis pulmones contraidos, cosa que no ayudaba en absoluto; al respirar, tenia que suspirar, aunque era algo mas como un jadeo o sollozo, ya que parecia que no entraba el suficiente aire a mis pulmones.
Mi cara ya no estaba hinchada pero las venitas de mis ojos si estaban reventadas por tanto llorar; si alguien me hubiera visto en ese momento podria jurar que acababa de drogarme.
Algo estaba mal. Muy mal. Las posibilidades de que, marcos haya dejado de... quererme, eran pocas -al menos eso queria pensar-. Pero independientemente de eso ¿donde habia quedado todo? ¿nuestras esperanzas e ilusiones? ¿se habian ido asi como asi? ¿el amor? ¿ los planes de una familia?¿se habian esfumado?
Yo sabia que todo este año de relacion no habia sido solo una alucionacion, todo habia sido real, lo suficientemente real para causarme daño al final...
Al llegar a la escuela simplemente me dirigi rapidamente al salon de mi calse de literatura. sabia que mis primos me estarian esperando en algun lugar de la cafeteria para entrar todos juntos a la clase, pero yo no me veia del todo bien y no me sentia con animos de dar explicaciones a nadie, aunque sadia que tal vez ellos ya estuviran enterados, yo era demasiado orgullosa para permitir que me vieran asi.
De camino al salon inhale y exhale varias veces, trate de mantener una respiracion acompasada, pero era dificil debido a los malditos defectuosos pulmones.
Me detuve en la entrada del salon cuando me di cuenta que ya todos mis primos estaban ahi, que me conocian tan bien, que sabian que no debian esperarme; veian todos el marco de la puerta... esperando algo... mi llegada. Al pércatarme de todas sus miradas, tome aire por la boca, Parpadee varias veces y baje la mirada para que no pudieran ver mis ojos aterradores.
yo me sentaba junto a mi primo Richard, el mayor. Tome mi asiento sin decir ni hacer nada mas que eso, aun con la cara gacha deje mis cosas sobre mis piernas y suspire.
Senti como dejaba puesta su mirada en mi cabeza, pero no lo voltee a ver, me dio verguenza caer tan bajo.
El profesor Lopez entro con el clasico saludo al auditorio, l grupo saludo a coro como siempre lo hacia, yo no lo hice, aunque de todas maneras me puse de pie. Me volvi a sentar al tiempo que lo hicieron los demas, sin saber en realidad lo que estaba haciendo, no puse mucha atencion en esa clase, el maestro se dedico a explicar sus teorias sobre la locura shakespeare y su obsecion por romeo y julieta, aunqe despues de decir precisamente, lo que iba a explicar deje de escucharlo, simplemente miraba al frente sin decir nada.
Al toque del timbre, tome mis cosas y sali rapidamente del salon, todos venian detras de mi y Richard se colo co justo a mi lado, al llegar a la puerta del otro salon me tomo por el hombro, me giro para que pudiera verlo y dijo:
-estamos contigo niña linda, siempre vamos a estar contigo, para todo, pero, ¿estas lista?
-¿lista para que?
-ay emilie por favor!
-por favor que!?
suspiro y dijo:
-en esta clase te sientas con marcos...
El recuerdo me produjo un escalofrio, tenia razon y yo ni siquiera lo recordaba, era patetico. me limite a asentir, me abrazo y nos dirijimos cada uno a nuestro asiento; pero me percate de algo.
Marcos ya no estaba sentado en el lugar siguiente al mio, sino dos filas despues, tres lugares detras, sentado con Silvanna...ellos, ellos...se estaban besando.
El mundo entero se desplomo sobre mi espalda, Richard que aun iba detras de mi tambien pudo notar como, todas y cada una de mis celulas se estaban muriendo, la imagen era desgarradora, al menos para mi...
-maldito perro -escupio Richard.
Me quede helada, no entendia nada, ahora, esto definitivamente tendria que ser una maldita pesadilla, una maldita y estupida pesadilla... la peor de todas. ella habia sido mi mejor amiga durante años, y el...el... el era el amor de mi vida, aunque yo ya no lo fuera para el...
Cuando el beso termino, no deje de mirarlo, entonces el poso sus ojos en mi, noto mi llegada, no dijo nada, parpadeo dos veces, se levanto de su lugar y me dijo:
-¿que haces aqui?
Su pregunta era estupida, en estos momentos no sabia que hacer si decirle todo lo que lo extrañaba, cuanto lo amaba, que regresara conmigo, suplicarle o escupirle en su maldita cara... opte por la segunda opcion, o algo parecido.
-¿que que hago aqui? ¿se te olvida? sigo existiendo, y tambien vengo a la escuela ¿no se nota? -mis palabras tenian cierto tinte de acido, lo dije de una manera dura y fria, como en las novelas que veia mama cuando yo era pequeña.
meneo la cabeza y se volteo pero lo detuve tomandolo del brazo, y lo hice girar de nuevo.
-entonces era por ESO -dije marcando enfasis en la palabra mientras miraba a aquella estupida adolescente igual a mi- ¿no?
-Emilie por favor...
-no, por favor nada -alce dos octabas la voz, la profesora no llegaba y esto no terminaba aqui- soy una persona, y lo menos que meresco es una explicacion.
Silvanna se coloco entre nosotros dos y me dijo:
-Emm, en serio, no es lo que parece -la rabia se adueño de mi y le solte una bofetada que hizo que voltera toda su asquerosa cabeza del otro lado...